10 ene 2021

El billete del Santuario

A igrexa de Santo André de Teixido súmase á lista de monumentos e centros culturais e de referencia turística de Europa que contan cun billete de cero euros. O cedeirense Óscar López García, que rexenta desde 2016 a taberna Os Loureiros, a poucos metros do santuario, encargou a edición de cinco mil exemplares deste euro souvenir. A ermida aparece no reverso, mentres que o anverso está ilustrado con algúns dos elementos máis singulares do patrimonio cultural europeo, como a torre Eiffel, o Coliseo romano ou a Sacra Familia. «Descubrímolo o ano pasado, de vacacións en San Sebastián, e despois púxenme en contacto coa empresa que os distribúe en España. Pareceunos un produto interesante para pór á venda», explica este hostaleiro. No interior do seu local hai un expositor de billetes, que custan 2 euros, e pronto disporá dunha máquina expendedora no exterior.

Un coleccionista de Sevilla xa conta cun exemplar do billete de cero euros de San Andrés de Teixido, igual que algúns veciños da zona. «Fabrícanse nunha das imprentas oficiais de euros en Francia, en auténtico papel moeda e con todas as características de seguridade: marcas de auga, tiras de cobre, impresión en relevo sensible ao tacto, holograma, rexistro transparente, tinta fluorescente visible baixo luz ultravioleta e un número de serie individual, único en cada billete», sinala López.

A sensación, ao tocalo, é a mesma que produce un billete real de 20 ou 50 euros. A edición en España comezou a finais de 2017 e agora xa hai euro souvenirs do acueducto de Segovia, a catedral de Burgos, a praza das Vendas, a porta de Alcalá, a casa Batlló, a basílica de Covadonga, a Sacra Familia, o Camp Nou ou o Camiño de Santiago (leste saíu en 2019). Francia foi o país pioneiro, en 2015, e seguíronlle Holanda, Eslovenia, Suíza, Portugal, Bélxica ou Alemaña. «Está tendo tal éxito que algúns billetes foron reeditados ata venderse máis de 200.000 exemplares», destaca o promotor da edición do billete de San Andrés. Cada vez suscitan máis interese entre coleccionistas e chegaron a pagarse a máis de mil euros en poxas.

Fuente: https://www.lavozdegalicia.es/noticia/ferrol/2020/12/06/santuario-san-andres-teixido-billete-oficial-cero-euros/0003_202012F6C9991.htm


La paloma: paz

 La paloma es un animal que ha sido simbólico a lo largo de la historia, por eso, al pensar en ella se nos pueden venir a la mente sus distintas facetas. Haciendo uso de su gran sentido de la orientación, la paloma ha sido popular como paloma mensajera desde la antigüedad. Es por ello que fue la elegida por Noé para traer el mensaje del fin del diluvio y, con ello, la paz en la Tierra, convirtiéndose así en símbolo de paz. Además, es emblema de la pureza y la inocencia, imagen del Espíritu Santo.

La paloma, desde los tiempos más remotos de la historia de la humanidad, es considerada un animal sagrado. Estas transmitían su poder a las esencias del culto e incluso a las mismísimas deidades y, tanto es así, que podemos verlas posadas en las cornisas de los templos, en las vidrieras, pinturas…  la creencia es que consagran los lugares donde se posan. La paloma preside el retablo en la iglesia de San Andrés de Teixido.

En la mitología griega la paloma se nos presenta con dos semblantes perfectamente definidos, conectados los dos al poder y al espíritu de la romería de San Andrés de Teixido: el amoroso o amarorio y el funerario o mortuorio. Por ambos motivos puede aparecer este amuleto en el ramo de los romeros.


La sardina: alimento

 El pez, en el cristianismo, es el símbolo de Jesús. Él multiplicó panes y peces para dar de comer a una multitud hambrienta y los sanandresiños con forma de pez se encargan de que nunca nos falte el alimento. Gran parte de los apóstoles, entre ellos San Andrés, eran pescadores, lo cual nos da una idea de la importancia de este animal tanto en relación al alimento como animal sagrado con connotación positiva.

La inmersión de los peces en el agua hacen que sus simbologías se hallen íntimamente ligadas. El simbolismo del agua es complejo, pero se distinguen principalmente tres conceptos asociados a ella: fuente de vida, centro de regeneración y, por supuesto, sistema de purificación. De estas tres premisas encontramos numerosas referencias en todas las culturas del mundo antiguo.

Por último, destacar que el pez, símbolo de fecundidad por la cantidad de huevos que depositan, es el encargado de guiar nuestro camino a San Andrés de Teixido. Para realizar la romería se deben seguir los hitos que se encuentran marcados con la figura del pez, cuya boca señala la dirección y el sentido que conducen al santuario de la fertilidad.


La corona: protección

 Al pensar en una corona se nos viene a la mente la ostentación del poder. A lo largo de la historia, en distintas culturas, la coronación ha asumido un papel sagrado, un claro símbolo del éxito y de la conquista de las metas que nos marcamos. Pero su forma oculta un significado mucho más trascendente. Su situación en lo alto de la cabeza y su forma circular la relacionan con la divinidad.

Analizando el universo, nuestros ancestros se percataron de que la esfera es la configuración más perfecta y natural, véanse las estrellas, los planetas, los átomos, las burbujas… Por ello convirtieron la redondez en un símbolo sagrado. El círculo en sí, que se cierra sobre sí mismo, enlaza lo terrenal con lo celestial, cuerpo y alma, y de ahí que se haya considerado desde tiempos inmemoriales como distintivo de la protección y que muchos elementos protectores hayan adquirido dicha forma, como en nuestro caso la corona de San Andrés entre los amuletos sanandreses.


El santo: salud

 Andrés, del griego «hombre valiente y fuerte», fue un santo generoso y con don de gentes. Fue el primer discípulo de Jesús, dejando las redes para convertirse en «pescador de hombres». Se mantuvo muy cercano a él, habiendo sido partícipe de muchos de sus grandes acontecimientos. Es por esto que, de los sanandreses, el que representa la figura de San Andrés vela porque tengamos una buena salud física y mental, el sentido común activado y amistad duradera junto a los nuestros, siempre buscando que sepamos convivir con la gente que nos rodea, para que practiquemos el afecto y el amor.

Cabe destacar que desde la prehistoria, en los lugares de culto, se piden deseos que se encomiendan a la intervención de algún dios o santo al que se le obsequia con ofrendas. Pedir por la salud es una de las cuestiones más destacadas en general y estos sanandresiños con forma de santo, en particular, cuidarán individualmente de cada uno.





La mano: estudios

 Las manos han intervenido de manera vital en la evolución del hombre ya que son las herramientas que nos permiten interactuar con nuestro entorno tal y como nuestra mente idea. Con todos los atributos que las conforman, se trata de un instrumento exclusivo del ser humano.

Las manos y los dedos nos permiten crear, percibir y comunicarnos, de ahí que sean de gran importancia en la formación y el progreso. Los estudios son un regalo para los cinco sentidos, por esta asociación los sanandreses se elaboran con la mano abierta, favoreciendo a que tengamos los cinco sentidos activados para el aprendizaje.

En ocasiones la imagen de San Andrés, al igual que la de los otros apóstoles, se muestra sujetando en su mano un libro o un pergamino, fuentes de sabiduría que conservan los escritos a lo largo de la historia.


La barca: viajes

 La barca se encuentra asociada al propio viaje que es la vida, dando significado a la embarcación como el medio de transporte que nos ampara ante los contratiempos que van surgiendo. Por tanto, la barca como amuleto, popular entre los marineros, sirve para que cualquier viaje que emprendamos llegue a buen fin, protegiendo a aquellos que se aventuran. A quienes hayan decidido cambiar el rumbo de algún aspecto de su vida, los sanandresiños con forma de barca les aportarán la fortaleza y la protección necesaria en su nueva travesía.

Asimismo, la barca es un símbolo habitual del tránsito entre el reino de los vivos y el de los difuntos, escenarios separados en algunas culturas por un río que es preciso atravesar en barca con su respectivo barquero, como por ejemplo Caronte en la mitología griega. Se trata de un viaje que, tarde o temprano, todos habremos de emprender y que, además de tarde, deseamos que sea sereno.